sábado, 25 de enero de 2025

ILUSIONES PROPIAS


No cometeré el error 

de no vivir en el incendio

como aquellos que le rinden culto 

a la materia.

No vacilaré 

en desdeñar la opacidad de los templos

que desprecian 

la urente fragancia de la carne. 


No dimitiré 

sin haber explotado delicadamente,

y de nariz en nariz,

cada rostro de los girasoles

empotrados en la sequedad

del firmamento.


Que la locura borbotee 

en sus semillas

y sustituya los vanos artificios

de los que nunca amaron.

Que la locura se propague 

porque vulnerables son

al carbón enrojecido.


Ojalá que el delirio se derrame

en la frente y en la vista, 

en la cavidad del oído,

porque amar 

es arriesgarse siempre

cual maraña

en la flama del anhelo. 


Amar,

definitivamente,

es un morirse de a poco,

cargando las ilusiones propias

y sosteniendo las ajenas.  

lunes, 23 de diciembre de 2024

ANDAMIO

 


El muro te dirá que no, 

la lluvia te dirá que no,

la gente te dirá que no. 

Pero eres más

que un débil resplandor 

entre las nubes.

Más que el color y la forma

y esa pasión desmedida

que te mantiene arriba,

siempre arriba, 

bailando sobre los andamios

un delicioso vals,

solamente audible,

en los protectorados del sueño.

Para contornear la luna, 

delinear el rostro de las aves,

tan grande como lo desees

y de paso darle 

algunas pinceladas al sol.

Dibujar puñados de alas 

para que lo toquen 

y ascender 

siempre ascender 

junto a tus creaciones

ignorando la caída.

miércoles, 11 de diciembre de 2024

Homilies

A golden image 

as the sun renders its homilies.

I think not of where I came from, 

but of when. 

There is a sepia sob 

that I cannot peel off.

I put on a centipede as a tiara 

because company is expensive, 

that is why I have dressed 

of hummingbirds.

miércoles, 27 de noviembre de 2024

MACERO MIS SUEÑOS

Foto: Francisco Navarro Ruiz


Con vocación de odio

macero mis sueños en la nuca,

porque creo,

en la devastación de los astros,

en los murmullos del polvo,

en la divinidad de las larvas. 

Aunque el caos 

esté enamorado de sí, 

aún veo revolotear a las abejas 

para no caer 

en el telar de las arañas.


Porque el dolor me suma, 

como aquellos que cargan el fardo 

y la herida desde la infancia. 

Me suma un dolor 

como la aguja en la pupila de lo vivo

que jamás se presta a zurcir 

las facciones de una sombra,

esa que se irá, 

con la misma casualidad 

con la que llegó 

arrastrándose a mis pies.  


No pasaré desapercibido,

yo, que he cuidado 

cada uno de mis pensamientos 

como a una luciérnaga

en los días de seca y de osamentas. 


Aunque no haya terciopelo en mi caída

o un suspiro entre las bestias,

tan fundamental,

como cierta melodía 

entre las sienes del viajero,

mis ojos seguirán fijos  

en la lejanía de las montañas.


Nuevamente,

he recurrido al insomnio

por su afinidad con el humo. 

No le temo a la tormenta, 

sino al abrazo de los hongos

cuando aromatizan toda tumba. 

No le temo, 

me digo entre los dientes,

a darle la espalda a la vida. 

miércoles, 30 de octubre de 2024

LA URNA

                                Foto: Francisco Navarro Ruiz


Hurgando en despojos varios


de estas locustas grafías,         

  

entre sus vocablos rotos


que vibran de acústica onda


justo al clarear los días.


A leguas del pulcro tacto 


y la extrañeza del agua


que ha pepenado sus notas


en aquel viento sin tregua


y una canción morinata.


Es justo a medio desierto


de vastedad celulosa,


donde está el signo y la marca


de aquel insepulto abismo


y unas moneras de plata.


Las fragancias de uno mismo


en la cresta de una duna 


o ese nimbo de la idea 


que solamente aquella urna,


tan saciada de animismo,


nuestra oscuridad aguarda. 



domingo, 25 de agosto de 2024

QUE SEA EL OLVIDO

 

Que sea el olvido 

el más letal de mis desprecios.

Ante tu sapiencia de témpano,

calculadora dama,

la media vuelta es cura. 

Ni una mirada 

merece la flor que al poeta 

no devuelva la sonrisa,

ni una palabra 

merece el silencio.

Todo se ha volcado en ruinas, 

los tesoros de Urano,

la desbocada aurora 

que nos empuja a su abismo.

Un griterío de insomnes

que a nadie deja descansar

y arrastra cierta soledad dolora,

que en maledicencia mía,

te arrojó para que vuelvas 

a mis brazos,

porque posees por esta vida

el mismo hastío que yo,

por esta niebla 

que en su vapor se obstina,

el mismo hartazgo  

por las cosas,

por los seres

y por cada minucia que flota 

en la opacidad de tus ojos

que maltratan hondo.

Es por ello,

que sea el olvido 

el más letal de mis desprecios.

viernes, 26 de julio de 2024

PROMETEO (soneto)



Encadenado Prometeo yace,

el titán con la entraña renovada  

que eviscera diario la garra alada  

y castigarlo una y otra vez le place.  


Brisa de mar que alivio da salada 

y al cielo no permite se destace

a ese ladrón del fuego que renace

sobre cada suspiro en alborada. 


El hígado trozado les complace

pues le robó a Helios la chispa forjada 

y ser del hombre su inmortal enlace.


Benefactor de la flama dorada

encadenado Prometeo yace

por bien burlar la voluntad sagrada.